Le voyage à Londres [3ème jour] - Como en casa

Era domingo y Neus tenía que marcharse. Una pena... pero es lo que tiene... su curro no es tan flexible como el nuestro :P

Y en nuestra agenda matutina, el Candem's market...

Pillando un metro llegamos al mismo inicio del mercado. Es gigante. ¡Creo que jamás había visto tal cantidad de ropa de mi gusto reunida! Eso sí, cara... eh? Cara de cojones.
Lo recorrimos un par de veces. Me tentaron un par de camisetas y unos pantalones del Liverpool... pero al final dudando dudando uno acaba sin comprar nada. Así que me fui como llegué, con las manos vacías (que mirándolo por el lado económico tampoco está mal :P).
Eso sí, lo que sorprendentemente sí estaba a un precio razonable en el mercado era la comida (como ya nos había dicho la Costris). Así que siguiendo su consejo nos zampamos un par de trozos de pizza jejeje.

Sin darnos cuenta se nos habían hecho las cinco y pico de la tarde y, sin pensarlo dos veces, pillamos el metro para trasladarnos al centro, para empezar nuestro rutinario pateo, pero esta vez hasta la zona de la Tower of London.

La primera cosa interesante que vimos fue el Monument, que conmemora el « Great Fire of London » (que arrasó la ciudad durante tres días y la dejó prácticamente destruida en 1666... desde luego eso sí que es una jruñada de nivel). Allí nos hicimos una foto en medio de la carretera Carmen y yo, mientras algún coche que otro pasaba por nuestro lado (ahí con dos cojones xD).
A este super obelisco le seguiría la Tower of London, que a causa de unas obras había perdido un poco de su encanto.

Como buenos chicos (que lo somos...) en la Tower of London.

Aunque nuestros ojos ya habían fijado otro objetivo... desde allí ya se podía divisar el famoso Tower Bridge, que tantas veces habíamos visto antes en fotos, ¡y que ahora lo teníamos enfrente de nuestras narices!
Aquí os dejo una fotico de los pringaos de turno:

¿Cuántas veces habría visto yo esta cosa en la portada del Brave New World? ;)

Después de contornearlo y verlo (y fotografiarlo) desde todos los ángulos nos hipnotizó un condón* y le seguimos el rastro. Ahí fue cuando nos dimos cuenta de que nos gustaba deambular por la ciudad, una ciudad inmensa como Londres, solamente dejándonos llevar por el sentido de la orientación... sin uso del mapa, y charlando tranquilamente mientras nos acercábamos al gran edificio.

Samu y Carmen con el condón (esto sí que es n'importe quoi).

Nuestros pies ya no daban para mucho más, de manera que la decisión de tomar el bus dirección casa Nuria fue bastante obvia. Y allí terminamos la noche los tres, acompañados naturalmente de la sevillana y Nuria, que se hincharon a contarnos historias de les d'agarrar-se del cap (como decimos en València) de sus familias xD

Lo que nos reimos...

*condon: super edificio de negocios (con forma de profiláctico) de la zona del Tower Bridge.